En el centro de Ankara, capital de Turquía, se encuentra un monumental mausoleo dedicado al fundador de la República moderna: el oficial y estadista Mustafa Kemal Atatürk.
Pocos personajes de la historia de este país han dado tanto que hablar en el contexto internacional. La eterna disputa entre Turquía y Armenia por determinar el genocidio armenio tiene como uno de sus centros de eje a este personaje histórico, loado en el país islámico y acusado de asesino en el país armenio.
Esta prolongada, compleja y difícil disputa ha hecho famoso tanto a Mustafa Kemal Atatürk como a su mausoleo, visitado por cientos de turistas atraídos también por la rica arquitectura.
Dicha edificación fue erigida entre 1944 y 1953, una época donde la arquitectura turca obtuvo un gran crecimiento y notable renovación, destacándose en monumentales construcciones simétricas y matemáticamente calculadas con perfección utilizando materiales como la piedra y el concreto.
Hoy por hoy y pese a las acusaciones externas, Turquía sigue considerando a Atatürk como su héroe y padre de la patria. La construcción está emplazada en un amplio parque que se ha convertido casi en un lugar sagrado para el espíritu nacional turco.
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